8 de agosto de 2014

Porque eres mi comienzo y mi final...

            
         Mirar al calendario y ser consciente de todo lo que nos ha llevado hasta aquí, o mucho mejor, pensar en todo lo que realmente nos llevó a conocernos aquel 9 de agosto de hace ya 3 años. Han cambiado tantas cosas desde entonces… Pero, ¿sabes? Lo que no ha cambiado es la manera en la que te veo, en la que mi corazón late por ti, la manera en la que mi respiración se entrecorta con sólo escuchar un susurro que proceda de tus labios. En tu mirada sigo viendo aquellos mágicos amaneceres de Londres, en tus besos sigo encontrando mis ganas de descubrir las maravillas que esconde tu boca. Siempre fuiste tú, siempre seremos nosotras… Siempre seremos tu y yo, porque ya lo éramos incluso antes de conocernos, eso lo sabes tu muy bien. Antes no creía mucho en el destino, en que todos tenemos ya un camino marcado. Entonces me hiciste entender que mi destino estaba contigo y ahora ni siquiera me imagino un segundo de mi vida sin ti. 
            ¿Quién lo diría, verdad? Éramos como el fuego y el hielo, como la luna y el sol, éramos cielo y mar… Tan distintas. Quizás ese es nuestro mejor truco, saber ser el complemento perfecto de la otra, porque nosotras encajamos como dos piezas hechas a medida. Yo no soy perfecta, tu tampoco lo eres, pero juntas creamos lo más perfecto que yo he llegado a conocer. El mundo es un paraje de ensueño desde que te conocí. Y hoy es un día para celebrarlo, para celebrar el comienzo de nuestro pequeño gran infinito.

           Es asombroso cómo llegaste y en tan sólo un segundo pusiste mi vida patas arriba. Cogiste y te apoderaste de todo lo que hay en mi. Y sigues haciéndolo. Nadie en este inmenso universo como tú. Simplemente es que no me creo la suerte que tengo. Tu me das mucho más de lo que yo podía imaginar, más de lo que nadie podría soñar.  Ya no es únicamente la manera en la que me haces sentir volar con todos tus detalles, ni que me trates como una auténtica reina, que me hagas sentir como la única chica existente en la tierra… Tu me das mucho más, me cuidas, de proteges. Has hecho por mi lo que nadie más habría hecho, me has dado más de lo que merezco, y no sabes cómo te lo agradezco, mi amor.
            Hoy y  cada día del resto de nuestras vidas, Recuerda: Siempre tuyo, Siempre mío, Siempre nuestro.

                                  Te ama con todas sus fuerzas, tu (eternamente) Carlibiris.


18 de marzo de 2013

Por el mejor hombre del mundo.



Un padre es el soporte en nuestro hogar,
el que se guarda los sentimientos en la profundidad de su alma,
el que te da seguridad en tus horas de angustia,
es el héroe de tus cuentos infantiles,
es aquel que te impone respeto en la adolescencia
pero si te fijas bien,cuánta ternura desprenden sus ojos al mirarnos.
Es quizás el que no te prodiga de besos y abrazos como tu madre,
pero en las noches cuando uno duerme,es el que se asoma con suavidad a tu cuarto
y con suma delicadeza cubre nuestro cuerpo con la sábana que hemos enrollado a nuestros pies,
mientras la emoción le nubla los ojos, porque se siente tan orgulloso de tenernos.
Tenemos que comprender el papel que muchas veces se le asigna a nuestro padre,
un papel un tanto distante, severo,
¿quién de nosotros no habrá escuchado de su madre alguna vez decirnos: "se lo voy a decir a tu padre cuando llegue",
y uno se siente temeroso pero a la vez espera ansioso por el regreso del padre
y cuando lo alcanzas a divisar desde la ventana,
ya no temes el regaño, lo que esperas anheloso,
es su abrazo protector.
Gracias a todos ellos, nuestros padres.

La imagen de tu presencia está siempre detrás de mis ojos; en todos los acontecimientos importantes de mi vida, en todas las decisiones que he tenido que tomar, en todas mis alegrías y en todos mis anhelos, siempre estás conmigo.

Eres como el eje que guía mis pasos. Papá, tú eres la frontera de mis actos, eres el reglamento que se pregona en casa y que viene a mi memoria en el momento en que más te necesito.

En ese sentido siempre estás conmigo, pues eres la solución a todo lo que a mí me parece imposible. Eres el modelo que a veces critico por fuera, pero que admiro por dentro; eres como el control que a veces hecho en cara cuando me creo toda un mujer, pero que luego las circunstancias me demuestran que realmente te necesito.

Eres el modelo fuerte, mimoso, sabio, conocedor. Muchas veces te veo serio o triste, pero otras tantas alegre y risueño, pero siempre con la misma actitud de padre cariñoso y comprensivo. Eres el padre que siempre tiene tiempo para mí y todo lo que me parece importante siempre te interesa. Eres la voz de mando, paciente y tolerante, pues nunca contradices las opiniones de los demás, sino que dejas que cada quién manifieste su punto de vista sin imponer tus propias ideas. 

En eso te complementas muy bien con mi mamá. Eres el padre que conoce siempre los peligros antes que yo, eres quien me alerta, me previene y me pone en guardia. Eres quién lee en mis ojos lo que a veces quiero ocultar y adivina de mi corazón lo que no quiero mostrar a nadie, y así, me vas enseñando poco a poco a crecer. Papá, cuando triunfo en algo, te alegras como si fuese un logro tuyo, y con tu ejemplo, no me dejas que me envanezca, comprendiendo siempre que es fruto de mi esfuerzo y en función de ello lo mides. 

Cuando fracaso en algo, no me recriminas ni me acusas, al contrario, me orientas para comprender que hice mal, y con tu ejemplo, me muestras el rayito de luz que me permite seguir adelante. No recuerdo que jamás me hayas abandonado a mi suerte, pero tampoco quitas todo lo que me rodea en mi radio de acción para que descubra por mi misma las piedras del camino. No me atas las alas, me enseñas a volar, no me amarras los pies, me enseñas a caminar, no me construyes el edificio, me pones los cimientos y me enseñas a usar las herramientas constructivas. 

No me educas a la antigua, pero tampoco me dejas hundir en el modernismo desenfrenado. No me impides divertirme, pero me haces entender los niveles, los muros que llevo dentro para cuando sea necesario oponerme y defenderme. Siempre buscas la manera de que nuestras vidas encajen, eres un hombre con cubierta dura, pero con una húmeda ternura que ablanda. Eres ese hombre que parece inflexible, tenaz, inobjetable, pero por dentro llevas incrustado el oro en el corazón y las pinceladas de cielo en las ilusiones.



Papá eres como un lazo que esta vinculado a mi vida, te quiero mucho y te admiro más.

24 de diciembre de 2012

The end.



            ¿Qué queda de mi? Sueños rotos y un montón de lágrimas. Un corazón herido y mil recuerdos que vienen a mi como un vendaval. Sola, asilada. ¿A dónde te fuiste, pequeña parte de mi alma? Busco en mi interior y ya no me encuentro. Todo te lo llevaste contigo.
            Miro a mi alrededor, mil caras conocidas, pero ninguna me dan respuestas a este caos de dudas que me surgen, no me dan la clave de la salida. ¿Qué nos pasó? ¿Por qué nos quitaron nuestro amor? ¿A dónde se van esas caricias que ya no se dan? ¿Y los besos?...¿Es este el final? Nuestro final.
            Me miro al espejo y no me reconozco. Aparentemente sigo siendo la misma, pero hay algo que se ha ido lejos de mi. No huyas sonrisa, algún día volverá la luz.
            El mundo, el que  yo conocía, parece haber sufrido un cambio infrahumano. Busco de nuevo mi lugar, pero es difícil encontrarlo si yo sigo perteneciendo al hueco que se forma entre tus brazos. Podrás encontrarme en la calle que te llevan a tus mismos pasos, no muy lejos de ti sigo yo, atándome a tu vida, lo que hace que cada vez yo me aleje más de la mía propia.
            Enfermo y dulce amor. ¿Cómo saber cuando parar? Asumir la derrota. Más vale conservarlo como el tesoro más valioso de mi vida, así que cogeré todos los momentos que nos hemos dado, junto con tu sonrisa, y los guardaré en un cajita en la que conservarlos por siempre. Paso mi corazón bajo candado, y dejo la llave en mi mente. De esta forma cada día podría adentrarme en mi misma y sentir de nuevo ese calor y cobijo que sentía exactamente en cada pequeño instante que viví junto a ti. Siempre como lo más perfecto e increíble que me ha pasado, así lo recordaré.
            Es hora de decir “Adiós”.
                                                                  Aunque yo siempre he sido más de los “Hasta pronto”. 



5 de agosto de 2012

Games

¿Por qué no, por qué no arriesgarlo todo? ¿Tanto miedo tienes a fracasar? Huyes de tí misma, finges ser quien no eres, cubriéndote con esa máscara de indiferencia y pasotismo. Te ocultas tras esa sonrisa falsa, esa que cuando llegas a casa, te borras con desmaquillante; el cual se mezcla con las saladas lágrimas que brotan de tus enrojecidos ojos, y que desenbocan en tu boca. Dime, ¿cuándo decidiste ocultar el sol para vivir de la noche? La oscuridad se ha convertido en tu amante, la soledad en tu compañera, y el dolor en tu aliado. Guardas un océano de llantos en tu almohada, sueños rotos y un corazón herido. Siéntate en este viejo banco, arráncate la piel, escarba con tus uñas hasta que des con tu verdadero "yo". Apuesta por tus ilusiones, por tus ideales. Te llevaré a dar una vuelta por la ciudad, quizá un poco de luz te sentará bien. Deja de sentirte como Alicia en un país sin nombre, sin rumbo. Te llevaré a caminar por el sendero de tus antiguos pasos, ¿has olvidado de dónde vienes? Tal vez por eso no sabes cómo empezar, ni hacia dónde ir. Acerquémonos al mar, es apacible sentir el agua fría recorrer tu cuerpo; sumérgete en el río de las sensaciones. Te llevaré a jugar una partida de Black Jack, apostaremos todo lo que tengamos en los bolsillos. Dos bontones, tres monedas y un dedal. ¿Y tu alma? En esta Ruleta Rusa que es la vida, lo único que realmente tiene valor es eso, tu interior; nada superficial o superflúo puede superarlo, así que apuéstalo todo por ella, por conseguir crecer y aprender de errores. Así es...Jugar al azar es nunca saber dónde vas a empezar o terminar.


17 de junio de 2012

Elegir.

Entre las múltiples opciones que ofrece la vida, a veces sólo podemos tomar una, cogerla y enfrentarnos con ella ante las adversidades, sean cuales sean las consecuencias. Es como en una partida de poker, quizá has jugado mal tus cartas y te quedes finalmente con las peores, pero defiéndelas, no te des por vencido, siempre quedará una mano más por la que apostar.
Enfrentarse a la guerra sin armas, no garantiza la derrota.

Cuando el camino llegue a su fin, porque es cierto, a veces lo inimaginable acaba; recuerda el duro trabajo que has recorrido por su paso, recuerda las metas alcanzadas, los tropiezos, los buenos y malos momentos, los de esperanza, angustia, cansancio; todo eso ya lo has superado, es hora de tomar de nuevo el rumbo de tu vida y volver a apostar, incluso con mayor ilusión, a otra jugada inesperada, completamente nueva, apasionante.
Encontrar la felicidad. Imagino que ese es el reto de todos, el tesoro más valioso. Sal y búscalo, porque puede estar donde menos lo pensaste, de la forma más inaudita. Mantén abiertos los ojos, agudiza tus sentidos, déjate llevar.
Los imposibles no existen, todo se resume en intentarlo hasta que las fuerzas no puedan más.

A28

Intentando encontrarte en medio del caos de mis pensamientos. Tu nombre mil y una vez escrito en mi aliento. La espera se hace larga si no te tengo, las noches vacías si no están cargadas de tus besos. Mientras, buscando un remedio, vuelvo a caer en el silencio, en espacios llenos de momentos, momentos carentes de cordura, empapados de deseo. Tus ojos chispeantes quemandome muy lento, tu tacto erizando poco a poco mi cuerpo.
Nos encontramos en un punto muerto, quedémonos aquí, sin contar el tiempo. Mil promesas por cumplir, sueños que se harán eternos, sentimientos descomunales.
Quédate, ahora, siempre, quédate conmigo, toma mi mano, hagamos juntos este camino. Quédate en mi mente, en mi corazón, en mi alma, en mi vida... Quédate, que sino moriría.
Trato de aprovechar cada segundo, pero todo me sabe a poco, un para siempre no es suficiente; tienes tantas cosas que quiero descubrir en ti, tu sonrisa guarda tantas incógnitas, tu mirada tantos enigmas, tu corazón tantas maravillas...Sólo quiero destaparlas poco a poco, que me dejes conocer todo de ti, que me des la oportunidad de ser la única, de iluminar tus mañanas y pintar con estrellas tus noches.
Amarte, tanto que hasta duele. Desearte, más de lo que imaginas. Extrañarte, más de lo permitido. Tenerte, más de lo que la vida me permita.

6 de mayo de 2012

Tengo algo que decirte

Quizá te preguntes por qué te he traído hasta aquí...
                                  ¿Pensabas que me olvidaría de este día y de lo que representa?
Eso sería como olvidar, que tu eres MI MADRE.
Hoy, 6 de mayo, tengo la necesidad de recordarte lo que a veces no se demostrarte de verdad, lo que en ocasiones se me pasa por alto, creyendo que lo sabes de sobra; pero aquí te dejo una muestra más de lo que  hay en mi interior. ¡PRESTA ATENCIÓN!

Sólo el amor de una madre
Sólo el amor de una Madre apoyará,
cuando todo el mundo deja de hacerlo.
Sólo el amor de una Madre confiará,
cuando nadie otro cree.
Sólo el amor de una Madre perdonará,
cuando ninguno otro entenderá.
Sólo el amor de una Madre honrará,
no importa en qué pruebas haz estado.
Sólo el amor de una Madre resistirá,
por cualquier tiempo de prueba.
No hay ningún otro amor terrenal.



Realmente no sabes lo afortunada que me siento al tenerte hoy aquí, que seas tu esa persona tan importante
en mi vida, la que me da sustento, alegría, apoyo... El amor más puro y sincero, ese me lo das tú.
Quisiera entregarte de vuelta todo lo que a lo largo de estos 17 años has hecho por mí, pero aunque me pasara toda mi existencia agradeciéndotelo y tratando de compensártelo, se que jamás sería suficiente; lo que tu me has dado, es incalculable. Trataré de demostrarlo cada día, lo prometo, y se que seguramente fallaré algunas veces en el intento, que no siempre seré capaz de aportarte un rayito de sol cuando lo necesites, pero prometo que siempre tendré en mi la mayor de las intenciones, unas intenciones tan honestas como el amor que tu me das. 
                                                 Papá y tu,son mis dos grandes pilares.


¿Sabes? Te doy gracias por ser una gran parte de mí por estar siempre a mi lado, cuando lo he necesitado y cuando no, por no dejar de luchar segundo tras segundo para que yo, sin merecerlo en algunas ocasiones, tuviera todo lo que creías que merecía, siempre mimándome más de la cuenta.  Gracias por inculcarme unos valores, los cuales me hacen ser mejor persona, me hacen crecer y madurar, me enseñan lo que es el mundo en realidad. Gracias por saber lo que me hace falta en cada momento, por esos abrazos reconfortantes, esas sonrisas esperanzadoras, esas palabras que llegan al alma, esos reproches educacionales, esa paciencia inagotable; gracias por ser mi guía en este camino de subidas y bajadas que es la vida, pero sobre todas las cosas, gracias por haberme traído al mundo y haberme dado lo mejor que tienes...Ese corazón bondadoso y noble.

Espero que hoy y siempre, te sientas todo lo especial que te mereces. 
Sólo quería que lo supieras una vez más

TE QUIERO MUCHÍSIMO.



30 de abril de 2012

El movimiento se demuestra andando


Una vez, Diógenes dijo su célebre frase de: El movimiento se demuestra andando. Quizá una de las razones ocultas por las que dijo estas palabras eran precisamente las mismas que las tuyas, así que levántate y sal de ese cuarto en el que has decidido aislarte, en el cual tratas de protegerte de todo, fingiendo que esos gritos que se oyen tras la puerta, y los problemas que se divisan a través de las ventanas, no van contigo, como si pudieras huir de ellos, como si de un momento a otro fueran a desaparecer. Coge esa vieja maleta que tenías olvidada bajo tu cama y guarda en ella lo necesariamente imprescindible, pero no olvides lo más importante: tus miedos. Llévatelos a dar una vuelta por el mundo real, muéstrales que tu eres muchísimo más fuerte que todos ellos juntos y que no podrán doblegar tu voluntad. Puede que haya momentos en la vida en que todo se te quede demasiado grande, en el que te sientas como que lo que te rodea va mal y que estás perdida, pero te diré algo, haz tu camino lo mejor que puedas, sin temer ni un sólo tropiezo, porque a veces, cuando uno está de pie, en lo alto, no se da cuenta de lo que hay bajo su mirada, entonces, cuando caemos y nos damos de frente, vemos que también debemos mirar hacia abajo y tener otra perspectiva de las cosas, usar otro enfoque y por un momento, creernos capaces de todo; así será posible.